SINOPSIS
Las dos partes de la ciudad de Nápoles, una rutilante y lujosa, y la otra triste y miserable, viven a espaldas una de la otra, con el beneplácito de las autoridades, que sólo desean mostrar al mundo el esplendor de la nueva ciudad. Pero la muerte de una vieja pitonisa revelará las ocultas y perversas relaciones entre ambos mundos, cuando la voz de la anciana asesinada llegue a los oídos del comisario Ricciardi.
OPINIÓN
En la segunda parte de la tetralogía del comisario Ricciardi
la primavera empieza a dejarse notar en la Nápoles de 1931. El fascismo pretende negar la
existencia del crimen en su país pero la policía sigue teniendo que enfrentarse
a asesinatos horribles y el comisario Ricciardi sigue teniendo que oír las últimas
palabras de cada uno de esos muertos.
En esta
ocasión una adivina es brutalmente asesinada en su casa de los barrios bajos. La
anciana tenía una amplia y fiel clientela que incluía a toda clase de gente de
todas las clases sociales, y más de uno podía tener razones para querer verla
muerta. Mientras tanto Maione, el compañero de Ricciardi, se enfrenta en
solitario a un caso de agresión a una joven bellísima que hará que sus
principios se tambaleen.
Luigi
Alfreddo Ricciardi es un personaje peculiar, solitario y misterioso, se toma
cualquier asesinato como algo personal. Tener que cargar con el peso de su
extraño don, puede ver y oír a los muertos en sus últimos momentos de vida,
hace que quiera mantenerse aislado socialmente porque cree que lo único que
puede aportar a otra persona es dolor. Por eso se limita a observar noche tras
noche a Enrica, la chica del edificio de al lado, sin atreverse a dar el paso
de conocerla por miedo a no tener nada bueno que ofrecerle. Pero el destino le
tiene reservada una sorpresa al comisario.
El caso se
va complicando cada vez más, en una época sin ADN, sin laboratorios forenses,
la policía depende de las declaraciones de los implicados para esclarecer los
hechos, y ciertas acciones los llevan por caminos equivocados. Siempre es
interesante ir intentando descifrar quién es el asesino según vas leyendo, ya
que en todo momento tienes la misma información que los personajes acerca del
caso.
El ritmo de
la novela, como en la primera parte, es bastante rápido y la historia es
entretenida en todo momento, no hay paja que ralentice la lectura. La
ambientación me gusta mucho, estamos muy acostumbrados, al menos los españoles,
a ver cosas ambientadas en la época de Franco, pero no tanto sobre la Italia del Duce. Y además
en Nápoles, una ciudad que siempre ha tenido problemas que la población intenta
ignorar, grandes desigualdades entre unos barrios y otros que pueden
desencadenar duros enfrentamientos.
Os vuelvo a
recomendar estos libros si os interesan las novelas de detectives, en este caso
con un punto diferente por la extraña habilidad del comisario. Ya he leído la
tercera parte y puedo decir que me ha gustado tanto como las dos anteriores.
NOTA
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